domingo, 2 de septiembre de 2012

No nos torturen

A propósito de las películas de Navidad que dan a mitad de año, muchas de ellas tratan de una persona casi genial, que no se ve influenciada por el bombardeo de publicidad navideña y rechaza el consumismo de aquellas fechas, pero finaliza en que el sujeto en cuestión ha abrazado el espíritu navideño y vive feliz por toda la eternidad comprando regalos de navidad que a muchos no les gustará. Son de las peores transformaciones que se pueden apreciar en las películas.
Por cierto, canales de televisión por cable, no den películas de Navidad en Septiembre, por favor.

3 comentarios:

  1. Gracias por leer de todos modos :) Por cierto, cuando deje un comentario, existe la opción de identificarse mediante cualquier nombre (sin cuenta), así es posible saber con quién tratamos.

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  2. Hola Pepi!!!
    Las películas en general, sin importar a qué género pertenezcan, son irreales. Para hacerse "la pelicula" nada como la realidad... y si encima de ser películas, además son navideñas: cartón lleno!!!
    Las dan en septiembre? No entiendo, en qué cabeza cabe?
    En fin, dijo Don Serafín, tocaremos hasta que aclare...
    Saludos pibita!

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